"Toda conversación tiene algo de compañerismo, de dar vueltas en torno a algo y de debate. La conversación, tan distinta de la charla y del monólogo, está abierta y no persigue otra cosa que el descubrir las cosas en su cercanía. En una conversación se cambian puntos de vista y se ahonda en las palabras. Porque las palabras mismas, como los oyentes, participan del diálogo. El lenguaje también conversa en la conversación. La etimología de la palabra conversación así lo atestigua. La latina conversatio era reunión e intercambio en torno a un centro intangible, suponía el ir y volver sobre las cosas y el uso frecuente de los objetos. Si se refería a personas tenía implícito un sentido de intimidad, de estar vueltos los unos hacia los otros y de un trato habitual entre los participantes. A su vez el verbo conversari que significa mantenerse ligado a un lugar y a una sociedad. Incluso el sujeto que ejercía la conversación, el 'conversador', no era quien hablaba, sino quien compartía una mesa. Todo aquel que conversaba era por tanto más un comensal, alguien que tomaba parte en una reunión, que otra cosa. No es anecdótico que todos estos sentidos de la palabra conversación se den aquí, actualizados..."
Santiago de Molina es Arquitecto por la ETSAM y doctor arquitecto. Colaboró entre los años 2002 y 2007 en el estudio de Rafael Moneo. Es profesor adjunto de Proyectos en la Universidad San Pablo CEU de Madrid y profesor visitante de la Universidad de Alcalá de Henares. Compagina su labor como docente con el trabajo profesional en su propio estudio. Ha recibido diferentes premios en concursos nacionales e internacionales. Su obra y escritos han sido publicados en numerosos medios especializados.
Ha publicado los libros Hambre de Arquitectura, Arquitectos al margen, Múltiples. Estrategias de la arquitectura, y Collage y Arquitectura. Dirige el blog Múltiples estrategias de arquitectura, dedicado a la divulgación e investigación de los procesos de la arquitectura.